ESCULTURA "PEJE LAGARTO Y BOTE GERMÁN"
La magia de los mitos de la infancia en tiempos donde la aventura era parte de la vida y de cómo de pronto brotan al mirar un pedazo de madera que los evoca.

Ibo Bonilla Oconitrillo

Un apreciado y admirado amigo, amante de las maderas finas y de la pesca aficionada, me regaló un pedazo de tronco de cocobolo de esos que en Guanacaste han sido testigos de la deforestación y repetidas quemas durante unos 70 años.

He estado muy ocupado con proyectos realmente atractivos y absorbentes, pero ese tronco no dejaba de mirarme y de pronto se llenó mi mente de las imágenes y emociones cuando de niños bromeábamos con el mito del "peje lagarto", el monstruo prehistórico de 66 millones de años, que podía permanecer fuera del agua por horas para cazar, ...y con sus dos filas de dientes en la mandíbula superior, ...merodear esos ríos todavía sanos y vivos, era como tentar al diablo!!!

Así que manos a la travesura de sacar ese peje lagarto que se me insinuaba en el tronco que todo lo ha visto y sufrido, ...era nada más quitarle lo sobrante del camuflaje!!!

...escultura "El Peje lagarto y el bote de Germán"

Por ese amor y admiración a las maderas preciosas, dejé todas las texturas posibles que me ofrecía una pieza con una historia que quería contar.

Le "dibujé" con las gubias las líneas básicas para sacarlo de su escondite, descubrí un anillo negruzco natural del cocobolo, limpié con cepillo de raíz el área de la cabeza para mantener ese sabor a sol guanacasteco, "sacando ese ojo" en la capa oscura.

Con cierta libertad artística, pero respetando la forma del pez saqué a la luz esas bellas vetas de sus entrañas.

Las plantas sub-acuáticas donde se escondía para sorprender a su presa, nada más requirió de aplicar cepillo de acero para mostrar la textura de vetas de la frontera entre el duramen y la albura que algo quedaba y mostraría una faceta suya pero poco vista en su natural belleza.

Y sí que se mimetiza con las plantas agua adentro y asoma su trompa y ojos al acecho.

Como es de fina madera y no muerde, hasta lo invité a la mesa, además entendió que somos vegetarianos y por eso le pusimos una papaya sobre el bote cuya sombra él mira desde abajo cuando cuando Germán va navegando por sus dominios.

...escultura "El Peje lagarto y el bote de Germán"

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