El famoso vestido que usó Marilyn Monroe en 1955, en la película The Seven Year Itch (“La comezón del séptimo año”) fue subastado por más de 2 millones de dólares. Aunque lo importante de la ocasión fueron los calzones. Son raros los fetichistas.
“ESOS  BIKINIS EN MIS MANOS”(1)

Por Ibo Bonilla Oconitrillo


Un memorable día, presentando el anteproyecto para el “show room” de Romanas Ocony en Zapote, explico que éste debe tener doble altura y desde  las oficinas de los jefes en el mezanine se debe poder ver lo que sucede en toda el área de ventas, …por lo tanto el pasillo de acceso a las oficinas debe conceptualizarse como una pasarela con piso transparente…


Interrumpe de inmediato una avispada vendedora argumentando:

- Jamás!!!, …con el piso transparente me verían los calzones!!!

Otra arquitecta al verme anonadado, me salva  respondiendo:

- Deduzco que sos de sapote, pero, …si no querés que te vean los calzones, la solución es que no te los pongas!!!

De todas maneras, …asocio sin decir nada, lo que un día me dijo el abuelo:

- El mundo está al revés: ...antes,  para ver las nalgas había que apartar los calzones!!!,
.................................. ...ahora, para ver los calzones, hay que apartar las nalgas!!!

.Imágenes de la historia del calzón


Puedo presumir y presumo de que “por mis manos han pasado miles de calzones”, y no sólo eso, me alimenté y estudié por mi habilidad con ellos!!!


Pero qué haré?, si  matemática e históricamente  hablando, su cantidad de tela tiende a cero…

Esa frenética tendencia a cero empezó en la década de 1950 cuando las damitas usaban con glamour esos calzonsotes que hoy llaman “de abuelitas” y cambiaron a usar los calzoncitos tipo “bikini”. Y me salvaron la vida, aunque otros miles la perdieran por ellos.


Esa prenda interior que conceptualmente son dos triángulos de tela, se llamó así en referencia  al Atolón Bikini, una minúscula, paradisiaca y exótica isla, con una laguna interior, que es una de las 180.000 islas de la Polinesia, como parte de los atolones que componen las Islas Marshall  . Pero no se le llamó así por tanta belleza y exoticidad mostrada.

Vista aérea del Atolón Bikini . Atolón Bikini
Es curioso, el Atolón Bikini visto desde muy arriba se parece más bien a un calzón de abuelita


El Atolón Bikini cobró notoriedad, sorpresa y terror mundial cuando entre julio de 1946 y 1958, allí se detonaron 67 bombas atómicas y de hidrógeno, para perfeccionar la efectividad mortal de las explotadas en los  bombardeos sobre Hiroshima y Nagasaki en agosto de 1945. Por lo demás, han dejado contaminada e inhabitable toda la zona hasta la fecha y la certidumbre de la inminente destrucción del planeta  a manos del “homo sapiens” ya que el impacto fue detectado en todo el orbe por la única red sismológica mundial en ese momento, la regida por los conventos Jesuitas (cualquier duda pueden preguntarla al Papa Francisco).

Explosión de Bomba de Hidrógeno en marzo de 1954 en el atolón Bikini . Explosión de Bomba de Hidrógeno en marzo de 1954 en el atolón Bikini
Imagen de la prueba atómica del 1 de Marzo de 1954 en el Atolón Bikini. La bomba de Hidrógeno
usada contaba con un poder de 15 Megatones (7000 veces más que la usada en Hiroshima en 1945)


En 1947, cuando el francés Louis Réard diseño un traje de baño femenino de dos piezas, causó otro estallido moral de dimensiones atómicas, hasta el punto que el creador no pudo encontrar ninguna modelo dispuesta a posar vistiendo las pequeñas prendas, por lo que tuvo que contratar a una bailarina de cabaret para poder dar a conocer su creación, la cual bautizó convenientemente bikini a la pequeña y explosiva prenda,  que luego fue impuesta de moda  por celebridades como Marilyn Monroe y Bridget Bardot.

Louis Read, diseñador francés, creador del  bikini contemporáneo . Bathing Beauties
Por esas fechas en algunas playas, un Comisario se cercionaba de que los trajes de baño
no superaran los 15cm sobre la rodilla


La carrera armamentista femenina había empezado un nuevo giro y el 31 de julio de 2010, la UNESCO inscribió al Atolón de Bikini como Patrimonio de la Humanidad, aunque la verdad no sé si por el mérito de de haber inspirado tan sugerente prenda, por la exótica belleza del atolón o por haber sido convertido en un cementerio de buques de la Segunda Guerra Mundial.


Como antes todo era muy lento, tuvo que pasar unos veinte años para que el diseño de bikinis pasara de ser un  traje de baño a ropa interior. Esto me ha parecido curioso ya que es de esperar que el recato de mostrar la piel, primero vaya desapareciendo a nivel privado que público, pero en términos de moralidad parece que todo funciona al revés.


Los blúmers o bragas, parece ser que fueron introducidos durante la Segunda Guerra Mundial  por una Sra. Bloomer de la Cruz Roja Europea, como un método de sanidad económico y práctico en comparación a los “bombachos” de la feminista Amelia Bloomer de 1850, que se trataban de unos pantalones ceñidos a la parte inferior de la pierna y muy amplios a partir de la rodilla. Amelia se rebeló contra la moda de la falda convencional que consideraba incómoda e inmodesta.


Bombachos de Amelia Bloomer en 1850.Protesta en calzones.Mensaje feminista
La feminista Amelia Bloomer en 1850 con sus bombachos, estaría luego protestando
pero usando otros modelos acordes a las tendencias en 1970 o en el 2012


El taparrabos es el tipo más simple de prenda íntima y  probablemente  fue la primera ropa interior utilizada por los seres humanos. Ya para 1960 existía  la tendencia a reducir el área cubierta por esta prenda hasta sólo incluir lo que se conoce por zona pudenda en la mujer: ano, perineo y vulva, mediante una prenda se le conoce con el nombre de tanga.


Toda esa historia y conceptualización se me agolpaba en la cabeza cuando un día a mediados  de los años sesenta, vi un calzón bikini que compró  una amiga en Nueva York y fabricado, cómo no, en Brasil. Allí mismo comprendí mi vocación de diseñador.

Clazones de abuelita.Optimización del material
Dos principios del diseño son la optimización del material y cubrir las necesidades básicas


En la ebullición de aquellos años sesentas, mi familia en una de las tantas iniciativas para sobrevivir, ya trabajaba fabricando artesanalmente calzones plásticos para bebés y luego calzones tipo “chorreador” o “de abuelita”, como se les llamó luego de que se popularizaran los bikinis.

Bien podía decir de que ya era diseñador profesional, dado que había convencido a mi madre de hacer juntos el diplomado por correspondencia de "Corte, Confección y Diseño" de la International Correspondence Schools  Scranton, Pennsylvania, fundada en 1888 (año recordado por el gran terremoto Fraijanes y el inicio de producción de Cerveza Pilsen y sus rubias).

De tal suerte que compartía con el Arq. José Ma. Barrantes en ser los primeros y únicos ticos en graduarse por correspondencia en las respectivas áreas, en la misma escuela. Ojo al dato, que el Premio Nacional de Arquitectura lleva su nombre y la escultura-estatuilla que la representa, tengo el gran honor de haberme correspondido diseñarla.


Esas pequeñas prendas representaban una excelente oportunidad de negocio,  ungido por el valioso aporte de un poco de picardía en la moralista Costa Rica de esos días. El mundo estaba al revés: una prenda con la décima parte de tela de un “calzón de chorreador” se podía vender por diez veces su precio!!!, increíble.

Tendencia cero resuelta .Problemas de diseño con los judíos ortodoxos
La solución al problema de la tendencia a cero de los calzones lo da esta turista durmiendo
en el aeopuerto, pero un diseño para los judíos ortodoxos parece más complicado


Así que por varios años (porque dice el abuelo: “el amor dura lo que dura dura”), cuando no estaba “estudiando” y aún en esos momentos, me dedicaba a diseñar, cortar y coser miles de docenas de bikinis que fueron los primeros en venderse en toda Centroamérica,  Caribe y más allá.

- ¡De nada, de nada!, ¡Fue un placer!

Creo que de allí me llegó la musa de la inspiración como diseñador y en especial por la síntesis de las formas,  el análisis extremo del funcionamiento de las cosas, así como la obsesiva  actitud de economizar  los materiales.

Y podemos cantar a coro:
"...corte, confección y costura, ...viva la Escuela de Arquitectura... "

 

El famoso vestido que usó Marilyn Monroe en 1955, en la película The Seven Year Itch (“La comezón del séptimo año”) fue subastado por más de 2 millones de dólares. Aunque lo importante de la ocasión fueron los calzones. Son raros los fetichistas..La inspiración de los colores

(1): El famoso vestido que usó Marilyn Monroe en 1955, en la película The Seven Year Itch
(“La comezón del séptimo año”) fue subastado por más de 2 millones de dólares.
Aunque los protagonistas de la ocasión fueron los "calzones de abuelita" y no el vestido.
Son raros los fetichistas
.

 

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